Maravillosa sorpresa llegada desde la querida Francia, cuyas escritoras ya sabéis que admiro mucho. Recibí noticias de esta novela a través del programa de televisión Página2 y las buenas críticas recibidas me animaron a pedirla para la biblioteca y por supuesto, ser la primera en leerla.
¿Os imagináis una librería que sólo vendiera "buenas novelas"?. Éste es el anhelo de sus dos propietarios, Ivan, un joven librero de azarosa vida y Francesca, una mujer de alta posición enamorada de los libros y la literatura, pero con un dolor profundo en su vida. La casualidad los reúne en una pequeña librería de Méribel y allí nace su sueño de abrir en París una librería llamada "La Buena Novela". Un selecto comité de expertos, rodeados de un gran misterio, puesto que no se conocen sus nombres ni ellos se conocen entre sí, les proponen periódicamente un listado con sus novelas favoritas.
En sus estanterías no hay novedades, no hay premios, no hay editoriales comerciales (aunque se pueden adquirir bajo pedido) ... sólo se podrán encontrar joyas de la literatura. ¿Os imagináis lo que sería pasear por sus expositores sabiendo que todo lo hay en ellos es maravilloso?. Sin embargo el proyecto no es del agrado de todo el público. Una gran campaña de difamación, envidias y ataques a los miembros del comité pondrán en peligro su sueño.
Pero lo que subyace realmente en la novela y lo que de verdad me ha enamorado de ella es la pasión desbordada por la literatura que algunos necesitamos para "sobrevivir" (de ahí el nombre de este blog). De lo que encontramos en la literatura de belleza, de descubrimiento, de enamoramiento, de trascender de nuestras propias vidas para vivir las vidas de otros.
Y por último, ¿os imagináis una biblioteca donde sólo ofreciéramos buenos libros?. Difícil decisión la que tendríamos que tomar los bibliotecarios para definir que es un buen libro y que no; arrastrados en muchas ocasiones por el frenesí de lo comercial, del marketing y del gusto del usuario, olvidamos también nuestro compromiso con la calidad, con la excelencia, con la sabiduría y también con lo hermoso (en un sentido estético amplio).
En fin, que me he enamorado y espero que vosotros al leerla también os apasionéis. Totalmente recomendable, regalable, prestable e intercambiable.
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