Durante la I Guerra Mundial, España se mantuvo neutral pero no indiferente al horror que se estaba librando en Europa. Más allá de los beneficios económicos que generó en muchas empresas españolas, hubo otra empresa solidaria olvidada por la historia y que fue la Oficina Pro-Cautivos, creada a iniciativa particular de Alfonso XIII y
mantenida con su propio dinero. Esta Oficina tenía como objetivo la localización, intercambio y repatriación de soldados en conflicto de todos los bandos, sin importar su nacionalidad, credo o situación. A lo largo de los seis años en que estuvo funcioanando se calcula que ayudó a 200.000 prisioneros, consiguió la repatriación de 70.000 civiles y 21.000 soldados heridos.
Esta novela recrea aquella maravillosa locura de Alfonso XIII, con una dosis precisa de intrigas políticas, espionaje, guerra y amor, mucho amor (quizás demasiado para esta novela histórica). La historia de aquellos funcionarios, voluntarios y diplomáticos, que salvaron la vida a miles de personas se recrea en esta novela con un ritmo acelerado que no te deja respirar; necesitas leer, avanzar, conocer los avatares de los protagonistas para llegar a un final un tanto edulcorado pero que deja muy buen sabor de boca.
Muy entretenida novela histórica (y ya sabéis que yo no soy fan del género). Estas vacaciones no os la podéis perder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario