La familia al fin se ha reunido. Meggie, Mortimer y Resa se encuentran a salvo en casa de la tía Elinor, rodeados de sus amados libros. Sin embargo la nostalgia por el Mundo de Tinta donde ha ido a parar Dedo Polvoriento, de las hadas azules, los elfos del fuego, el castillo de Umbra, los titiriteros, el bosque impenetrable.... está cada vez más presente en la mente y en el corazón de Meggie. Además Farid quiere a toda costa salvar de una muerte segura a su amigo el comefuegos.
Todo ello les lleva a invocar de nuevo a las palabras para entrar en ese mundo. Sin embargo, allí también existe el peligro y la muerte. Y eso es algo que ninguno de los dos había previsto. En el Mundo de Tinta también están los hombres de negro, Lengua de Víbora y la malvada Mortola que todavía espera vengar la muerte de su hijo. Las criaturas que Fenoglio había creado han tomado su propio rumbo y la muerte parece ensombrecer el Mundo de Tinta.
Entre tanto peligro, Mo y Resa regresan para ayudar a su hija, quedando atrapados en él. ¿Conseguirán salvar a Dedo Polvoriento?. ¿Regresaran al mundo real para salvarse de los peligros que les acechan?. Tendremos que continuar leyendo el último libro y esto promete muchas más aventuras.
Cómo suele pasar en las sagas, siempre hay un libro más flojo que otro. Esta segunda parte se me ha hecho más pesada de leer, hasta que en la recta final de la obra la aventura se anima.
Cómo suele pasar en las sagas, siempre hay un libro más flojo que otro. Esta segunda parte se me ha hecho más pesada de leer, hasta que en la recta final de la obra la aventura se anima.
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