Esta novela autobiográfica tuvo muchísimo éxito en la Europa de entreguerras, mucho menos para nosotros que ya hemos visto hasta el hartazgo a los cocodrilos comerse a los ñus del Serengueti.
Es un libro excesivamente descriptivo en las narraciones, paisajes, gentes, costumbres...pero hay que entender que estaba dirigido a un público europeo ávido de conocer el exotismo de África y de sus gentes.
Advertir que Denny no aparece hasta la mitad del libro y que sus escarceos amorosos no son tan excitantes como en la película. Sí me ha gustado mucho el hecho de que se contaban relatos e historias que ella misma inventaba a la luz del fuego. O que la música de un gramófono la acompañaba en sus largos períodos de soledad.
En fin, para romanticismo, la película. Para descubrir un poco más de Kenia, el libro.